Blog de León Cohen Mesonero

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viernes, 5 de mayo de 2023

Diálogos virtuales en 2011 entre dos vejetes en el viaje de vuelta

El Alquimista y Aladino mantuvieron unas charlas que quedaron reflejadas  en los "Encuentros en el jardín virtual"  publicados en mi libro Apuntes (2015). Lo que sigue pertenece a esos encuentros, aunque en un plano más íntimo y menos formal. Para evitar que se pierdan he creído conveniente subirlos al blog. Corresponden al primer trimestre del año 2011. 


Aladino: La gente me aburre de forma contundente, no hay tristeza interior en lo que digo, es sólo un rechazo visceral del que puedo evitar la expresión pero no el sentimiento. No me hace sentir desadaptado, simplemente me niego a ese rol y camino solo. Me hace bien caminar solo porque tengo la certeza única de no perder nada, la seguridad de que si intento aproximarme, en el mejor de los casos, me podría contaminar tanta estupidez y ese sería sólo el mejor de los resultados, si lo intentara.

No. Prefiero una soledad total en la que soy libre, profundamente libre de reír o llorar, sin tener que preocuparme de lo que pudiera ser más adecuado para el momento y que pudiera o no coincidir con mis más profundos deseos humanos o los de otros.

 En mi soledad, el campo es verde si debe ser verde o decido imaginarlo así y el Otoño puede teñirse de colores pastel, de hojas secas, si es que debe ser así o yo decido pensarlo, la tierra puede ser la arena de una playa o el musgo y la tierra, fértil y húmeda, de un bosque viejo. No me afecta la estupidez de las modas, prefiero el vaivén de las mareas. No tengo la más mínima necesidad de adaptar mi paso a nada sometido a "comme il faut", sólo necesito mi ritmo. No permito las censuras aunque admito el rechazo como parte de la libertad del otro o de la marea humana a la que pertenece.

Tampoco necesito decorar mi piel con tatuajes ni teñir mi barba que se ha hecho blanca por el camino.

Soy viejo y soy el artífice del hombre que he construido. Ése que hoy te escribe.

Alquimista: Estamos casi en lo mismo. Desde hace mucho tiempo yo también me he instalado en mi familia más próxima y vivo alejado  del resto. Tu opción es otra más. Otra manera de estar en el mundo. Lo importante es que te sientes bien así. Yo he llegado a la conclusión de que sólo me esforzaré en hacer aquello que me produzca menos conflicto y menos complicaciones, cuestión de ahorro energético. Además como regla general, los demás, esos otros que no son tú, a la larga sólo te aportan conflictos, ya sea de intereses o sentimentales, un gasto de energía innecesario que contigo mismo no tiene lugar. 

La estupidez está  a la vuelta de la esquina, hace parte de la condición humana. Ayer sin ir más lejos, tuve un conflicto con un estúpido en la escuela, le mandé una parrafada sin desperdicio y me quedé tan tranquilo. No es lo habitual, pero cuando salta la liebre hay que disparar con prontitud. No es fácil, pero hemos llegado a un punto del camino donde tenemos que haber prescindido de todo lo sobrante y tratar de disfrutar. .
"Ser el artífice del hombre que has construido" es importante, siempre que te guste el resultado. Lejos de nosotros la tristeza y la autocompasión, sentimientos inútiles.
.

Aladino: Mi soledad es ese lugar en el que la ausencia, el vacío, de criterio ajeno no me afecta, tampoco necesito aceptar lo que considero desatino a cambio de nada, tampoco exijo aceptación. No necesito aceptar ni que me acepten, me niego al trueque que me proponen. Debo ser en cierto modo un delincuente social.

Digo de mi mismo que soy "aspirante a ameba" y el que me escucha se ríe comprensivo sin saber exactamente lo que quiero decir y, yo me río interiormente, porque nadie puede averiguar que lo digo desde una atalaya, mi atalaya. Entiendo que no puedan comprenderlo con tan pocas dimensiones, no es que yo sea más grande es que el otro ha decidido ser más pequeño y yo soy como el agua, un poco camaleón, si fuera necesario ser cortés o amable pero sólo lo imprescindible, sin debilidades.

Me puedo congelar si hay que ser duro o hacerme vapor si necesito escapar, al final volveré a ser agua cuando lo desee y sólo discurriré por mi cauce, mi destino es el mar. Hago meandros cuando se interponen los demás con sus criterios insustanciales.

 Podría ser arrogante pero no lo soy, me quedo en "altivo", otra elección como la tuya. Elijo cómo ser sin tener en cuenta ningunas otras premisas impuestas. Sé que me entiendes.

Hace unos años aparece el "metrosexual", un arquetipo sometido a unas normas sociales que ellos suponen escogidas de su propia libertad de juicio ¿De dónde sale eso? Sale de una ciudad como Londres, de una pobreza interna absoluta, de una autoestima tullida, de una falta patológica de criterio en un mar de colores indefinidos y olores inciertos. Una confusión de teorías para acercarse miméticamente a la mujer. Supongo. 

A alguien se le ocurre escribir un libro como "Ensayo sobre la ceguera" y a otro loco se le ocurre llevarlo a la pantalla... luego aparecen una serie de locos-cuerdos que estiman que no es una película taquillera...¿Cómo va a serlo?

Pepito Grillo no puede ser el personaje central de ninguna obra sin un estúpido a mano, pero esa legión de estúpidos sí puede ser el personaje central de cualquier argumento, por ejemplo, de esta historia que llamamos la vida. Oiga, me bajo aquí.

Alquimista: El otro día hicieron mis alumnos su examen de aptitud en una de mis asignaturas. “Disaster”. No tienen capacidad ni educación para la reflexión. Hacen cosas, repiten lo aprendido, que no lo aprehendido, y son además gente muy poco leída. Tienen la edad de nosotros cuando nos conocimos, pero no hay color. No se me ocurriría preguntarles por Camus, pero seguro que saben de qué color son las medias de Ronaldo y conocen el último modelo de la Fiat. Estos Erasmus dejan mucho que desear. 

No creo que Internet y el Faceook les ayuden demasiado. Internet es una herramienta utilísima para gente formada y con criterio, pero muy peligrosa para esta gente. Vivimos una sociedad con ningún afán por el conocimiento como fuente de vida y de reflexión y con un nivel cultural medio muy  básico. Eso sí, consumismo por doquier. Pero sobre todo, lo asombroso, y que cada día percibo, es la pobreza de expresión y la nula capacidad de formular un pensamiento mínimamente elaborado que tienen la mayoría de nuestros conciudadanos. Los raros como nosotros, tenemos muy pocas oportunidades de encontrar interlocutores  con quien intercambiar algo que no sea el tiempo o el fútbol o la crisis.

Dos pensamientos para desarrollar:

- El control de la frustración. Un tipo frustrado es peligroso para él y para los demás. Y hay que aprender a capear los reveses que te da la vida.
- El paso del tiempo: más temprano que tarde, mañana será ayer.    

.   Hay mucho indeseable en todos los sitios. Suelo huir de los conflictos tanto profesionales como personales (algo que se llama inteligencia emocional), pero siempre hay algún tiburón dispuesto a hacerte la zancadilla. Menos mal que ya controlo mucho y no me dejo afectar. Esto es una jungla, no tiene remedio. Saber mantenerse al margen ha de ser nuestra virtud. Una gran mayoría de personas tiene una ignorancia absoluta de lo que significa empatía y consideración con los demás y así va el mundo. Siempre recuerdo una máxima de Kant, uno de sus imperativos categóricos: "Actúa siempre de manera que tu acción pueda ser extrapolable al universo", que no significa otra cosa que: Actúa lo mejor que puedas para que los demás puedan imitarte y eso redunde en el bien de todos. Yo siempre digo con cierta sorna: A mí que me registren.

Ayer, durante todo el día e incluso al llegar la noche, estuve como ido y medio dormido, ajeno a todo y a todos. Todo había terminado y llegó el bajón. Lo normal. Hoy, estoy disfrutando conmigo mismo de la satisfacción profunda que produce algo así como ganar el Goya o el premio a una vida profesional o ganar el Tour. Vuelvo a la normalidad sin asperezas, colmado y sobre todo muy, muy tranquilo, por fin. Cuando el presidente del tribunal, leía los méritos que me hacían acreedor a la Cátedra, según la unanimidad del tribunal, emprendí el vuelo y me alejé  del lugar, volé por mi pasado a velocidad de vértigo y sólo aterricé cuando paró y me dirigí a saludar al tribunal. Quedaron en mí, para siempre,  las palabras de algunos compañeros y compañeras,  cuando me estrecharon la mano o me dieron un beso: Te lo mereces.   Viví como tú dices, un momento mágico, de esos que guardamos como piedras preciosas en un rincón del corazón. Son pocos, pero ahí quedan.  

 

 Aladino: Sin duda  "tu público" estará muy contento... genial... y ahí no acaba la cosa, habrá quien se sienta algo jodido, que lo disfrute también y se joda a gusto...

A veces toca ganar y otras perder, cuando nos piden que contemos nuestras derrotas (generalmente no lo hace nadie, es una iniciativa personal) las recordamos con todo lujo de detalles, las alegrías parece que formaran parte de la vida cotidiana y se disipan rápido.

Seguramente te lo haya comentado antes, pero cuando vivo un momento mágico, me gusta pararme y analizarlo profundamente para que no se evapore tan rápido y que cuando lo haga aún pueda saborearlo de nuevo, generalmente hago partícipe de esos pensamientos a la gente con la que estoy en esos momentos, generalmente mis hijas. Se trata de crear un hito, una referencia mental para volver, un consejo: regálate algo que te guste mucho. Te servirá para revivirlo cada vez que lo veas. Te lo mereces, pisha.

Alquimista: Seguramente como hacen los abuelos, esto que voy a decir, ya lo hemos hablado, siempre nos repetimos o repetimos sin saberlo a otros.
Me refiero en este caso, al otro, a ese otro yo, que se expresa en silencio, que se expresa escribiendo, que convive con nosotros, entendiendo por nosotros, lo que los demás ven e interpretan. Aunque que al final seamos lo que aparentamos ser para los otros, siempre nos queda el convencimiento de ser además ese otro, que nadie conoce o que se da a conocer  parcialmente en sus escritos. Todos, tenemos ese yo al que solo alcanzamos nosotros, como decía Machado: Converso con el hombre que siempre va conmigo. Ese que nos acompañará a la tumba, ese que nadie puede ni siquiera rozar, ese que solo existe para nosotros mismos y que muy rara vez aceptamos compartir.

1.- Los manitas o inteligentes manuales, son para mí aquellas personas que naturalmente desmontan y montan aparatos, abren con facilidad lo que aparentemente los demás no ven, son buenos carpinteros y tienen generalmente una excelente visión espacial, entre otras cosas. Entre ellos he conocido a algunos familiares  y ahora a Jero el reparador de guitarras.
Por mi parte, yo me he convertido con el tiempo en un manitas por la fuerza de las circunstancias. Soy sobre todo aceptable para desmontar aparatos y he conseguido construir alguna que otra maqueta, pero no soy naturalmente manitas como vosotros. Tengo un tratado científico sobre la mano que nos muestra lo pareja que ha ido la evolución de la inteligencia con la de la mano humana.

2.- Las rebeliones árabes. No sé si es Occidente el que está manejando el cotarro para sacar algún provecho, pero coño ya es hora de desterrar tanta dictadura.

3.- Quiero convertirme al final de mi vida en el actor secundario de película de serie B y dejar el protagonismo a los otros. Quiero ser el psicoanalista y no el psicoanalizado, quiero ser el que admira y no el admirado, de los dos hermanos, quiero dejar de ser el guapo y quedarme con el feo... Aprender a escucharlos y pasar desapercibido, creo que ese es al menos un buen propósito y en ello voy a poner mi empeño.

Aladino: Con el paso del tiempo se van adquiriendo habilidades pero existen los "hábiles" en algún campo por propia naturaleza. Me gusta la madera, cómo huele el polvo de madera, casi no me molesta cuando se queda en las ropas, distinguir las diferentes variedades por sus vetas y tonos ¿De dónde puede venir eso?...

Debía de tener 5 años, no creo que más, vivía en una cuesta, en Ceuta (ese Norte de África es casi siempre montañoso), le pedía a mi padre que me hiciera un carro de esos que tenían las ruedas de cojinetes viejos. Él me trajo los tres cojinetes, dos medianos para atrás y uno grande para la "dirección". Yo jugaba con esos cojinetes y eran un material precioso que materializaría mis sueños, mientras, trataba que me prestaran algunos otros niños de la misma calle. Mi padre trabajaba en Trasmediterránea hasta muy tarde, los fines de semana le traía un taxi los libros de contabilidad: esos libros enormes y pesados. Comprendí que él no podría construirme mi carro... así que me armé de valor y me hice el mejor carro del mundo...

Una noche en Celupal (te lo he comentado antes) estuve desarmando algo, tal vez un encendedor. Un compañero que acabó siendo investigador me observaba y se guardó una pieza... luego hicimos bromas, te la habías guardado para ver si lo detectaba.

Me interesa el título de ese tratado sobre la inteligencia manual. Siempre la he percibido entre otras pero nunca desde un punto científico.

Espero que esas rebeliones se extiendan también a toda el África negra, son los que están peor, los que más las necesitan pero están demasiado ocupados en poder comer hoy como para preocuparse de si podrán comer mañana.

Llevo algún tiempo ejerciendo tu "punto 3", la sensación es que es lo que deseo hacer y es lo que hago con esos cafés a media mañana mientras observo rostros, oteo horizontes o me fumo un cigarrillo charlando en alguna terraza con un desconocido. Tengo también la sensación de que se me observa, de alguna manera se admira mi soledad y mi silencio, apenas hablo si no me dirigen la palabra, cortesía, y apenas se dirigen a mi, lo traduzco como un respeto profundo y distante. Me gusta estar solo y pensar solo.

Me encantan los niños, me jode profundamente que alguien me mire con ojos severos cuando me sorprende haciendo carantoñas en la distancia a algún niño. La gente piensa por esquemas recién aprendidos y la ternura que un viejo pueda sentir por un niño no entra en sus esquemas de ciruelo/cigalas, generalmente les mantengo mi mirada más desafiante y pienso lo más alto que sé, a ver si puede escucharlo: "Eres un hijo de puta, cabrón".

Alquimista:

1.- Tengo ciertas dudas sobre la igualdad de los cerebros. Por ejemplo, desde  muy muy pequeño admiré la honradez y el saber, ignoro por qué, pero debe de ser algo muy complejo e innato. De mis dos hermanos, ninguno se me parece en eso. Yo era incapaz de colarme en el cine y cuando lo intentaba, impulsado por él, siempre me cogían. Él siempre lo conseguía. Luego se ha visto lo distintos que somos y que ya éramos. Hay cerebros y sensibilidades  muy especiales. Ha de ser una mezcla de genes  y de circunstancias,  además de algo más. Creo en la esencia más que en la existencia. Se es antes incluso de existir. Nos podemos parecer en la existencia pero todos diferimos en la esencia.  Somos esencialmente únicos. Ese es el milagro del ser.

2.- Algunos días, cuando voy a buscar a mi nieto, coincido con el "Loco de amor ". En ocasiones, como hoy, me detengo unos minutos a charlar, pero su charla siempre acaba en lo mismo: en el día en que le dio una paliza a Pedro. Me cuenta ese hecho como si realmente hubiera ocurrido, cuando el pobre hombre, sabe que es un deseo frustrado. Lo que él hubiera dado por darle un mamporro a Pedro.  La gente miente y se miente. JM siempre cuenta que todo va bien, que sus hermanos son cojonudos etc...ni él mismo se lo cree. ¿Por qué la gente necesita mentir e inventarse un mundo imaginario? Conozco la respuesta pero no la comparto. Se puede vivir sin mentir...demasiado. Je,je...

Aladino: Amigo, con los medios y los profesionales actuales supondría un coste insignificante crear una nueva generación de PERSONAS capaces, libres y mucho más felices, coherentes y equilibrados, pero lo que interesan son consumidores que sostengan el sistema y mantengan el orden ya establecido, eso que tantas veces te he dicho que me recuerda a "Un mundo feliz". No podemos evitarlo, nunca pudimos hacerlo realmente... pero en aquella época intentamos cambiar al mundo como todas las juventudes y no pudimos... considerémonos satisfechos de que el mundo no haya sido capaz de apagar nuestras inquietudes ni limitar nuestros pensamientos.

No sirve para nada la inteligencia, no puede trabajar, si estamos sometidos de alguna forma, si sentimos ansiedad, inquietud o miedo. Mantengo el criterio de que la razón, el cerebro en general, es como un músculo que si no lo haces trabajar se atrofia, no creo que existan diferencias entre un cerebro muy "inteligente" y otro que no lo sea, sin ir más lejos el de Albert Einstein era más bien insignificante. Después de la dictadura se alcanzaron los mayores éxitos deportivos de nuestra historia.

Los prejuicios y sobre todo las religiones son nefastas para el desarrollo humano, creo que están montados precisamente para limitar ese desarrollo, aparte de como negocio lucrativo: El Vaticano tiene el PIB más alto y la mayor estabilidad política y socioeconómica del mundo... lo curioso es que no fabrica nada... 

 

Alquimista: Al final dices con palabras distintas lo mismo que yo sobre esencia y existencia.
¿Quien puede matar las ideas de Rabin o del Che o del Mahatma? Imposible. Las ideas pertenecen a la esencia del ser, son inmortales e intangibles. Podemos acabar con la maquina pero no con lo que la maquina piensa o siente. Un sentimiento es algo más que una cadena de reacciones químicas, aunque sea cierto que interrumpiendo mecánicamente con una ablación el origen de esas reacciones, el sentimiento deje de existir. Es difícil mantener esta argumentación, lo sé, pero  en ello estoy.
Tengo otra idea relacionada con lo somático y lo psicológico. Estoy convencido o casi, que nuestra mente es capaz de curar las enfermedades de nuestro cuerpo. Simplemente habría que adiestrarla. De la misma manera que nuestro propio cuerpo nos ataca, nosotros debemos de tener el poder de detener el ataque de manera consciente.  

Aladino: Cuando digo que, a mi criterio, los cerebros "son iguales" hablo de posibilidades pero muy remotas, de hecho lleva connotaciones intrínsecas tan infinitas como un genoma, tan extrañas o difusas como los pensamientos de un bebe que aún no ha nacido. No es un tema definible con la investigación, siempre quedarían cabos sueltos.

Cuando estás seguro de defender una verdad incuestionable, ya lo has logrado, no caben dudas... algunos matices extraños, tal vez la esencia a la que te refieres, lo confirma.

Dos hermanos mellizos o dos hermanos gemelos... uno puede desarrollar esquizofrenia y el otro no... ¿Educación, crianza, trato diferente de los padres...? Lo único que se puede demostrar es que la esquizofrenia no siempre tiene que tener origen genético pero nada más.

En realidad si a la vida le quitamos ese "algo más" y lo dejamos en genes y circunstancias, estamos simplificando tanto que lo que definimos podría ser el vuelo de un pájaro o un pájaro disecado, ese algo más añade el aliento, la esencia. No podemos quitarla.

Alquimista: Visto lo visto: Los sicarios, los comerciantes de la muerte de inmigrantes, los traficantes, los promotores sin escrúpulos, los banqueros insensibles, los que se piran dejando a su mujer cargada de hijos, los maltratadores, los que no pagan lo que deben, los que se construyen un CV a costa de los demás, los que aparentan, los que cobran y no cumplen, los que no quieren ni a sus hijos, los que no conocen más que su ombligo, los que engañan, visto lo visto, me ha dado por pensar si no me he equivocado de lado de la vida, porque ahora sé que trabajando y estudiando muy duro nadie gana lo que merece, que pensar en el otro te procura mucho sufrimiento, que vivir sin hacer trampa te hace parecer lelo... pero en el fondo soy feliz como soy y como decía Severiano Ballesteros, la vida es un hermoso camino con... contratiempos

Nunca me he movido con comodidad en público, es decir frente a los otros. En ocasiones, llevado por una espontaneidad impropia de mis años, he dicho o hecho cosas como poco, inconvenientes o poco acertadas. Mejor haberme aguantado o callado, me he dicho a mí mismo en soledad. No se puede ser siempre prudente, ni calladito, no se puede estar siempre al borde de la perfección, me he seguido diciendo. Quillo, no te la cojas con un papel de fumar, me he dicho para reconfortarme. Hay que saber bordear el ridículo y no asustarse, como haría un buen inglés. 
Y es que es tan difícil, compartir con los demás, humor y opinión, y es que es tan difícil, ser uno mismo delante de la gente, porque pueden ocurrir dos cosas que no te entiendan y se ofendan, o que no te entiendan y les causes risa, una risa idiota.  Mejor quedarme en mis escritos porque cuando hablo o bromeo, sube el pan. A veces me pregunto si no es preferible, dejarse la  opinión para uno mismo. Debería haber superado esta fase adolescente, pero en ocasiones, no puedo evitar no gustarme comparándome con un estándar de perfección que yo mismo me he construido o inventado. “Nobody is perfect” que diría Billy Wilder, con eso me quedo.   

Aladino: Sí, siempre hay retroalimentación en los diálogos, en realidad lo comentaba con "falsa modestia" pero es cierto.

El truco dejar un libro "en cualquier sitio" también lo he empleado, sobre todo con mi familia: es más saludable que las personas lleguen a puntos de vista de forma autónoma que se lo expliques con tus palabras, convence menos y no deja de ser una idea/comentario/criterio ajeno.

Sí, estoy también de acuerdo con lo de la empatía, sin ella es difícil ser carismático pero en el caso de la gente que vemos a través de los medios se trataría, creo, de una forma de comunicar (muy relacionado con la PNL, o ella misma), te lo he comentado alguna vez: con la PNL puedes "atraer" o hacer que el otro se sienta "rechazado" de forma totalmente voluntaria, controlando tus gestos y comentarios, de tal forma que la persona no lo percibe conscientemente (no se siente agredido) pero actúa en consecuencia de acuerdo con tu decisión. Es una forma "científica" de manipular. Opino que la manipulación no es un defecto en si sino una habilidad, dejarse manipular sí es abiertamente un defecto... las sociedades son adictas a dejarse manipular por comodidad, supongo.  

Mi "kuñao"  me comento alguna vez algo de un personaje tradicional cargado de tipismo y sabiduría:

"El baranda".

 Según él, este personaje es un viejo que dirige una sociedad gitana desde la sombra, no se impone. No hace nada, sólo vigila todo, generalmente desde una baranda en alto (de ahí el nombre). Todos le consultan sus dudas y él actúa como un sabio consejo de ancianos administrando justicia e interviniendo en casos de dudas. Nadie discute su soberanía y todos le admiran, lo quieren y le obedece sin chistar.

Resulta un personaje útil y cargado de sabiduría. Con el paso del tiempo, lo de "El baranda" pasó a ser un apelativo de "el jefe", pero me lo cuenta como te lo digo. Según internet se debe a otra razón, pero el personaje (real o ficticio) me fascinó siempre.

Tal vez hoy seamos hoy un poco "el baranda" de nuestro clan.

 

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